Registro Nacional de Artistas
Guillermo Jiménez es un personaje reconocido del municipio de El Jícaro, destacado tanto en el ámbito musical como en el deportivo. Su trayectoria en la música inició a la edad de 14 años, en la década de los años 60, cuando se integró a la marimba municipal de El Jícaro, en una época en la que hacía falta personal para completar el grupo. Desde entonces, formó parte de esta agrupación durante muchos años, desempeñándose en la percusión, donde comenzó a llamar la atención por su talento y entrega.
Gracias a su desempeño, fue invitado a formar parte de otras agrupaciones musicales. En los años 70, participó en el recordado programa de televisión Campiña, el cual ofrecía un espacio a los talentos más sobresalientes de todo el país. Este programa era conocido por tener un “filtro” peculiar: una figura de «La Llorona» que aparecía cuando el participante no era aprobado. Guillermo, con valentía, decidió participar y logró superar dicho filtro, interpretando una canción que marcó su primera presentación en televisión nacional, lo cual le dio mayor confianza para seguir su camino como cantante e instrumentista.
A lo largo de su vida, formó parte de diversas agrupaciones musicales como “Asses del Comando”, perteneciente a la Policía Ambulante, institución donde también prestó servicio como agente. Su talento musical lo llevó a ser transferido como músico oficial dentro de la misma institución, tocando las tumbadoras. Posteriormente, prestó su servicio militar en la Brigada de Zacapa, donde también fue invitado a integrarse a la marimba de dicha brigada tras descubrirse su habilidad musical.
Su carrera continuó en varias marimbas orquestas de la ciudad capital, entre las que destacan la Marimba Alfa y El Explosivo del Cuartel General, siendo esta última la agrupación con la que realizó su última presentación fuera de su pueblo, durante la década de los 80.
En paralelo a su carrera musical, Guillermo también se destacó en el ámbito deportivo, especialmente en el fútbol, participando en equipos de categoría especial y segunda división, donde recibió el apodo de “Yemito La Polilla McDonald’s” por su estilo de juego y carisma en la cancha.
Su último proyecto musical fue continuar tocando y transmitiendo su pasión por la música dentro de su comunidad, siendo un referente de identidad, talento y compromiso cultural para las nuevas generaciones de El Jícaro.
