Antiguamente, lo que hoy conocemos como «Parque San Miguel» era un espacio que los totonicapenses ocupaban como un mercado, donde se vendía toda clase de productos básicos, incluso había un espacio para la venta de animales, así mismo se encontraba la terminal de buses. Luego durante algunos años, específicamente en los años ’70’s’ y ’80’s’ este espacio se mandó a adoquinar y sirvió como un campo para el desarrollo de actividades culturales y deportivas.

Parte fundamental de la historia lo constituye el monumento del ferrocarril del norte, el cual en sus alrededores contaba con un jardín con algunas banquetas y que se le conoció por los años de 1900 como parque Guzmán en honor al coronel Agustín Guzmán que en ese entonces era el intendente, -hoy conocido como gobernador-, más tarde a este parque se le denominó parque San Miguel posiblemente por encontrarse en los linderos de la Cocatedral de San Miguel Arcángel de Totonicapán.

También la historia nos muestra que en ese espacio, que antiguamente fue ocupado por el mercado, también existió una parte del cementerio de Totonicapán que abarcaba los costados de la iglesia parroquial, de igual manera donde se ubica actualmente, se encuentra el colegio Pedro de Bethancourt y el teatro municipal.

Entre los años 1986 y 1989 se trasladó el cementerio a otro sitio.

La Directiva de los 48 Cantones período 2009, solicitó una reunión al señor alcalde y su corporación para presentarles algunas sugerencias sobre la construcción de esa obra, entre las cuales estaba lo relacionado al escenario para que se construyera con estilo colonial y de esa manera hiciera juego con el precioso Teatro Municipal.