Ubicado en Huehuetenango, Huehuetenango, este pequeño parque de forma triangular alberga el busto de Salvador Castillo Rodríguez, así como una fuente que también lleva su nombre.

Salvador Castillo Rodríguez fue una figura destacada en la historia local, reconocido por su contribución al desarrollo cultural y social de la región. Su legado ha dejado una huella importante en la comunidad, motivo por el cual se decidió rendirle homenaje a través de este espacio público.

El parque no solo sirve como un lugar de esparcimiento para los vecinos, sino también como un sitio de memoria y reconocimiento hacia quienes han aportado al crecimiento de Huehuetenango. La fuente, además de su función ornamental, simboliza la vitalidad y la continuidad de la historia local.

Este espacio invita a la comunidad a reflexionar sobre su identidad y a mantener vivo el legado de sus personajes ilustres, fortaleciendo así el sentido de pertenencia y orgullo regional.